Los días de calor y las olas de calor afectan a todas las mascotas y los gatos no son una excepción. Hemos visto grupos de gatos tumbados, sin ganas de moverse, sofocados bajo en sol.
Lamentablemente, los gatos son una especie que sufre el calor más que otras y son más propensos a sufrir golpes de calor. Son más propensos a sufrir hipertermia (subida de la temperatura corporal) porque no sudan (solo por las almohadillas, barbilla, labios y ano), no jadean como los perros y una forma de refrescarse es lamerse el pelo pero eso les hace gastar saliva, es decir, les hace gastar agua. Además, si tienen mucho calor, pierden azúcares y minerales por la sudoración y puede afectar mucho a su salud, hasta podrían morir en minutos.
La temperatura corporal normal en gatos es de 38-39ºC, si pasa de ese rango es cuando está en peligro de sufrir un golpe de calor y es el objetivo a alcanzar cuando ha subido su temperatura.
¿Cuáles son las causas del golpe de calor en gatos?
Suelen ser las mismas para la mayoría de especies de animales.
La temperatura alta, la humedad alta, la falta de sombra, la falta de agua y la falta de ventilación son los mayores peligros para causar un golpe de calor en un gato.
- Temperatura alta: hace subir la temperatura del cuerpo y necesita refrescarse de alguna forma, que suele ser sudar (pero no pueden sudar mucho), lamerse y gastar saliva (agua), estar a la sombra o beber agua
- Humedad alta: la humedad alta dificulta la evaporación del sudor y de la saliva del pelo y, así, cuesta más reducir su temperatura corporal
- Falta de sombra: necesitan sombra para resguardarse del sol directo y tener un espacio con unos grados menos que el especio al sol
- Falta de agua: el agua es importantísima para evitar golpes de calor, para evitar la deshidratación y reponer la que se ha gastado en lamerse el pelo y en el sudor
- Falta de ventilación: por ejemplo, estar en un coche con las ventanas subidas o muy poco abiertas, o en una habitación donde hace mucho calor y el aire no corre hace que la temperatura del cuerpo suba mucho y muy rápido, produciendo un golpe de calor y, si no se actúa pronto, la muerte
¿Cuáles son los síntomas del golpe de calor en gatos?
Si tu gato ha sufrido un golpe de calor, es muy importante saber distinguirlo para actuar rápido y ayudarle a bajar su temperatura corporal o ir al veterinario. Los síntomas principales son:
- Demasiada pereza: si tu gato apenas se mueve y no quiere hacer nada, ni jugar ni comer ni levantarse, puede ser un síntoma de que tiene mucho calor y se siente incómodo. Puede ser un principio de golpe de calor.
- Le cuesta respirar: respira muy rápido porque le cuesta respirar. En un ambiente con humedad alta hay menos oxígeno. Además, el cuerpo intenta bajar la temperatura y gasta energía, para eso necesita consumir más oxígeno que no pueden destinar a la respiración
- Saliva mucho: salivar es un síntoma de deshidratación y necesita beber agua urgentemente
- Aumenta el ritmo cardíaco: la deshidratación hace que el ritmo cardíaco aumente. Se cree que es por el aumento de noradrenalina, “hormona del estrés” que incrementa la frecuencia cardíaca para aumentar el flujo de sangre a los músculos y para oxigenar el cerebro
- Mucosas azules: si el gato tiene la lengua, labios y/o boca azules, es un síntoma claro de golpe de calor
- Tiembla: sus músculos tiemblan y tienen espasmos
¿Qué hacer si un gato sufre un golpe de calor?
Es muy importante actuar rápido porque el gato podría morir en minutos, por eso hay que saber qué hacer porque no siempre hay tiempo suficiente para ir al veterinario.
- Llevar al gato a un sitio fresco: así se para la subida de temperatura corporal
- Refrescar con agua: de forma gradual (nunca de repente o le causaríamos un shock) por ejemplo con un spray dosificador, poner agua fresca en la cabeza, cuello, axilas e ingles, que son las zonas con más circulación sanguínea cercana a la piel para bajar la temperatura de la sangre que luego va a recorrer el cuerpo. La cabeza y el cuello es para evitar daños en el cerebro. Si no funciona y hace falta bajar la temperatura más y más rápido, se puede usar un ventilador o refrescar poniendo hielo cerca de su cuello, nariz, axilas o ingles pero no tocando el hielo
- Humedecer el cuerpo y las mucosas del gato: tiene que ser agua templada ya que el agua fría le provocaría un shock por un cambio de temperatura repentino tan grande y mantenerlo hasta que su respiración se haya normalizado. Humedecer su pelo para ayudarle a eliminar calor y sus mucosas (nariz, boca)
- Controlar que la temperatura corporal se mantiene estable: para eso puedes usar una toalla húmeda con agua templada, pero no envuelvas al gato porque necesita transpirar y la toalla lo impediría
- Llevarlo al veterinario: cuando su estado haya mejorado, tienes que llevarlo al veterinario para que le haga un chequeo completo porque el golpe de calor podría haber dañado órganos como el hígado, los riñones o haber afectado al sistema nervioso. Un golpe de calor puede provocar daños irreparables en algunos órganos y/o en el sistema nervioso
¿Cómo prevenir y evitar un golpe de calor en gatos?
Los consejos para prevenir un golpe de calor en gatos y en otros animales son consejos que siguen la lógica.
Para evitar el golpe de calor, necesitan tener agua fresca a su alcance (los gatos no están atados pero los perros a veces sí, y si la cuerda o la cadena no llega al agua no sirve de nada), también necesitan tener sombra para no estar al sol directo ni deben estar en sitios pequeños sin suficiente ventilación como coches que en verano se convierten en hornos, ni deben hacer demasiado ejercicio en las horas centrales del día, cuando hace más calor, sino que deberían hacerlo por la mañana y al atardecer, cuando la temperatura es más suave y agradable.
- Agua fresca a su alcance
- Sombra a su alcance
- Nunca estar en sitios pequeños con poca ventilación
- No hacer demasiado ejercicio en las horas centrales del día
Los gatos son muy sensibles al calor y les cuesta más reducir su temperatura corporal. Con estos consejos se pueden evitar los golpes de calor en gatos.
Resumiendo, los más importantes son tener agua, tener sombra, un sitio con ventilación y no hacer mucho ejercicio cuando hace más calor. Si un gato ya está sufriendo un golpe de calor hay que hacer todo lo posible para que su temperatura corporal disminuya rápidamente o podría morir en minutos y, cuando ya esté bien, llevarlo a un veterinario para chequear posibles daños en órganos y en el sistema nervioso.